La comunicación gráfica juega un papel fundamental en la lucha contra el coronavirus. Transmitir un mensaje de manera ágil, sencilla y eficaz puede marcar la diferencia en una situación de crisis.
El diseño gráfico ha cobrado gran relevancia, por su utilidad, en las distintas campañas e informaciones difundidas por los distintos organismos gubernamentales y autoridades sanitarias.
Las mascarillas, los geles desinfectantes, los pasos en el lavado de manos o las ilustraciones del virus han copado los grafismos del último mes en todos los medios y canales de comunicación aumentando, en algunos casos, la sensación de confusión e incertidumbre ante la propagación de la pandemia.
Y es que, en un contexto como este, el lenguaje visual es primordial para apaciguar el miedo. “La comunicación gráfica ayuda a asimilar las ideas y a reducir esta sensación de miedo e incertidumbre, ya que entender la realidad nos ayuda a hacerle frente”
El valor de los gráficos y mapas interactivos
Las tablas de datos o los gráficos y mapas interactivos son otro de los elementos que están acompañando a la comunicación de todo lo relacionado con el coronavirus, especialmente en los informativos y la prensa digital. “Se están mostrando algunos modelos matemáticos, muy visuales, que explican diferentes escenarios en función del cumplimiento o no de las medidas de permanencia en los hogares“, ayuda a potenciar el mensaje de #QuédateEnCasa y concienciar a la población.
Un ejemplo de esto son los modelos interactivos que ha generado el periódico estadounidense The Washington Post para explicar la evolución de los distintos escenarios de contención mediante GIFs.
Caso 1: libre movimiento
Caso 2: Distanciamiento social
Caso 3: confinamiento
Por su parte, la representación ilustrada del medio neozelandés The SpinOff se ha popularizado, con ayuda de las redes sociales. En una sencilla animación explican los distintos escenarios y la evolución de la curva de contagios en función de la participación y colaboración ciudadana con las medidas de prevención.
La colaboración ciudadana
No toda la comunicación gráfica en relación al coronavirus procede de las instituciones o de las grandes empresas. Los ciudadanos también están participando en iniciativas, como #ViralKindness (amabilidad viral), gracias a sus conocimientos y habilidades en diseño y su voluntad de contribuir al bien común. Tal es el caso de Becky Wass, una profesora de Reino Unido que ha diseñado una tarjeta de presentación para aquellos voluntarios que ofrezcan su tiempo y servicios para ayudar a personas contagiadas por el COVID-19. La tarjeta, que además incluye instrucciones cautelares básicas, está disponible en redes sociales y en un documento para que aquellos interesados la impriman y peguen en sus domicilios.
La comunicación gráfica por sí sola no evitará la propagación del virus, pero es una gran aliada para concienciar a la sociedad. Se trata de una situación excepcional y todos los recursos de los que se disponga son bienvenidos para transmitir la información de la mejor manera posible, uniendo esfuerzos frente al coronavirus.